En las últimas horas ha corrido el rumor de que Windows 8 empezará a soportar procesadores de 128-bit, todo a partir de un perfil de LinkedIn de un trabajador de Microsoft. ¿Qué credibilidad que tiene este rumor? En principio ninguna, ya que es difícil y ridículo adaptar software… a una arquitectura que ni existe ni se la espera en los próximos años.
Suponiendo que el perfil del tal Robert Morgan fuera real, lo más probable es que se refiriera a soporte para discos duros o FPUs con punteros/registros de 128-bit, no a un procesador nativo de 128-bit. Hacer todo un sistema operativo escrito en 128-bit sería una locura hoy por hoy, gastando una bestialidad de memoria y recursos sin ganar nada a cambio.
Para comprender por qué resulta ridículo este rumor expliquemos por qué se ha realizado el paso a los 64-bit. La mayor limitación que imponía los 32-bit es que solo puede trabajar con 4GB de memoria RAM, prácticamente lo que llevan todos los ordenadores que se venden hoy. Con los 64-bit este límite se queda en 16 exabytes (16,8 millones de Terabytes): siguiendo la ley de Moore quedarían más de 50 años para necesitar esa cifra, y sinceramente no creo que la arquitectura actual dure tanto tiempo. Para que os hagáis una idea, esa RAM podría direccionar todos los datos que hay ahora mismo en el mundo.
En los artículos también se menciona IA-128, supuestamente una arquitectura evolución de IA-64 (Itanium). El problema es que IA-128, a día de hoy, no existe, aunque no dudo que Microsoft obtiene información de su partner antes que nadie. Intel, la creadora de esta arquitectura, no ha anunciado qué planea para el futuro, y no creo que esté demasiado contenta con un Itanium, que le ha dado más problemas que otra cosa. Internamente Itanium ya trabaja de alguna manera con 128-bits, por ejemplo es su longitud de palabra aunque luego cada palabra contenga 3 instrucciones.
De hecho, la mayoría de los procesadores actuales tienen varios registros de 128-bit. Las extensiones SSE los necesitan para realizar cálculos matemáticos útiles sobre todo para operaciones multimedia, aunque en realidad no trabajan con datos de 128-bit sino con varios datos de longitud menor (32-bit, 64-bit, etc) de manera simultánea. En esto podría estar trabajando Robert Morgan, pero hay que tener en cuenta que las versiones anteriores de Windows ya usan cuando pueden SSE, así que no hay nada nuevo.
Por otro lado, AMD ha venido aireando durante un tiempo las instrucciones de 128-bit con su propuesta de SSE5, ahora partida en varios subcomponentes y que se supone lista para 2011 cuando salga al mercado su procesador Bulldozer. Intel se ha sumado a la guerra con AVX, otro conjunto de instrucciones incompatible con el anterior y que incluso define registros de 256-bit, pero repito, con la arquitectura en sí trabajando con 64-bit. En fin, esta guerra es muy amplia y cada poco tiempo hay novedades, y como estamos en el blog de software dejaré a Xataka que os explique todos esos asuntos.
Mi punto es que los procesadores de 128-bit, a pesar de lo que leáis, no existen ni están planeados para los años próximos. La arquitectura en sí seguirá siendo de 64-bit, y los creadores de procesadores no van a tocar ese número. Las mejoras de Hardware previstas se basan en más procesadores dedicados (por ejemplo gráficos) y más núcleos, y en mejorar este aspecto se están centrando la mayoría de SOs actuales. Dudo mucho que Microsoft gaste recursos en este proyecto tan a largo (larguísimo) plazo cuando la transición a 64-bit no está siendo tan suave como debiera.
Parafraseando la célebre pero apócrifa cita de Bill Gates: 64-bit deberían ser suficientes para cualquiera